FAMILIAS TRANSNACIONALES - TRANSNATIONAL FAMILIES

FAMILIAS TRANSNACIONALES es un "e-think tank" en el que investigadores y tomadores de decisiones se encuentran para intercambiar ideas, información, experiencias, proyectos, y contactos, de modo de comprender-actuar en favor de los aprox. 30 millones de Trabajadores Inmigrantes Latinoamericanos en el mundo.

jueves, 19 de junio de 2008

El Parlamento Europeo aprueba sin enmiendas la directiva de retorno de 'sin papeles'

Los inmigrantes irregulares podrán ser retenidos durante 18 meses y los menores podrán ser expulsados - ELPAIS.com / AGENCIAS - Madrid / Estrasburgo - 18/06/2008
Los inmigrantes sin papeles que sean detenidos en suelo europeo podrán pasar hasta 18 meses retenidos en centros de internamiento mientras se tramita su expulsión. Podrán ser detenidos con una mera orden administrativa y una vez expulsados no podrán volver a la UE en cinco años. Los inmigrantes menores de 18 años no acompañados podrán ser repatriados. Así lo ha refrendado el Parlamento Europeo, que ha aprobado sin enmiendas -tal cual le llegó de los ministros de Interior- la llamada directiva de retorno de los inmigrantes, que pretende armonizar las distintas políticas sobre inmigración ilegal de los países miembros.
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RETORNO - La directiva prevé la repatriación al país de origen del inmigrante, a un país de tránsito con el que la UE tenga acuerdo de repatriación o a otro país al que el inmigrante decida ir, siempre que sea admitido.

RETORNO VOLUNTARIO - Una vez emitida una orden de expulsión, se establece un periodo para el retorno voluntario del inmigrante, de entre 7 y 30 días. El periodo puede extenderse en función de algunas circunstancias (hijos escolarizados en el país, lazos familiares, entre otras).

RETENCIÓN - Comunicada la expulsión, el internamiento en un centro -nunca cárcel- podrá ser decidido en caso de "riesgo de fuga" o si el inmigrante sin papeles rechaza su repatriación. Se garantiza el acceso de las ONG a los centros de internamiento, así como la posibilidad de que el inmigrante recurra la orden de expulsión. Asimismo, se garantiza al detenido la asistencia jurídica gratuita según la legislación nacional y con los límites de la directiva sobre asilo.

DURACIÓN DE LA RETENCIÓN - Se establece un periodo máximo de internamiento de seis meses, ampliable a 18 en caso de "falta de cooperación" del inmigrante para su repatriación o problemas en el proceso (obtención del permiso del país implicado u otros). Tras esos 18 meses, si no se ha producido la expulsión, el inmigrante debe quedar libre. Varios países europeos no tienen actualmente límites temporales para el internamiento de inmigrantes. Para los que, como España, cuentan con periodos inferiores, no se obliga a ampliarlos.

PROHIBICIÓN DE ENTRADA - Tras su expulsión, el inmigrante no podrá entrar en Europa en un plazo de cinco años (más si se aprecia que supone una "amenaza grave" para el orden y la seguridad.

MENORES - Los menores no acompañados y las familias con menores serán internados "como último recurso y durante el menor tiempo posible". No obstante, los menores no acompañados podrán ser expulsados a países donde no tengan un tutor o una familia siempre que haya "estructuras adecuadas de acogida". Mientras estén internados, se les garantiza el "acceso a la educación".
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FUENTE:

miércoles, 18 de junio de 2008

Migración en Honduras y VideoCartas

Interesante series de videos cortos sobre una innovadora manera de facilitar el mantenimiento de vínculos familiares entre migrantes transnacionales y sus familias de origen.

Primera Parte: Honduras y las causas de la Emigración Transnacional

Segunda Parte: Testimonios de Familiares de Migrantes y Dramatización de un Caso


Tercera Parte: Proyecto de VideoCartas "El Puente"


Se puede encontrar otros videos e información clave sobre la migración hondureña en: http://migracion-remesas.hn/

martes, 17 de junio de 2008

Supporting immigration with "música"


Source: Iconoculture

WHAT'S HAPPENING

It's a collaborative CD with a message. Some of New York's best-known musicians, led by Dan Zanes, have come together to promote a pro-immigration stance and an appreciation for Latin American culture.

¡Nueva York! is more than a heap of sabroso tracks. It features several genres, including blues, jazz, cumbia and merengue — and in keeping with its pro-Latino immigrant theme, all the tunes are in Spanish.

Bottom line: The artists represented, including Lila Downs and hip-hop poet La Bruja, believe immigrants are as much a part of the American fabric as anyone else (NYDailyNews.com 5.22.08).

WHAT THIS MEANS TO BUSINESS

By bringing the sounds of hip-hop, merengue and cumbia together on one album, there's a good chance that consumers who buy it for one artist will hear something new — and chances are they'll buy into the pro-immigrant message.

Cultural expression can put positive spin on hot-button topics like immigration, allowing consumers to open their minds to different points of view.

“Consumer Patterns of Undocumented Immigrant Youth: Constraints and Possibilities”


Julian Jefferies (Boston College)

Consumer culture has become, in a post-traditional society, the most important way that individuals construct their social identity. As social status is no longer given or ascribed, individuals communicate their gender, social class, ethnicity, culture, nationality and various subjectivities through the act of consumption. Instead of these being regulated by tradition, consumer goods become “crucial to the way in which we make up our social appearance, our social networks (lifestyle, status group etc.), our structures of social value” (Slater, 1997, 30).

For immigrant minorities living in the United States, consumption is a sphere that both contributes to class stratification, ethnic segmentation and status inequalities, while also presenting opportunities to minimize the stigma of lesser social and class status by the creation of meaning through diverse styles of consumption (Campbell, 2005). Recent studies of minority consumers in the United States have looked how these populations may modify consumer products and processes to suit their own needs.

Miller (1994) looked at how low-income consumers in stratified societies engage in ‘creative consumption’ that entail both ‘complementary and contradictory strategies’ (79-81). In Davila’s (2001) comprehensive study of the impact of the American consumer economy on Latino ethnic minorities, the analysis focuses on the Hispanic marketing industry and its construction of a ‘Hispanic culture’.

For Campbell (2005), the consumer styles of working class Mexican-Americans on the border “embody a considerable degree of creativity, contradiction and hybridity” (207): while this population is able to create spaces of resistant cultural meaning within Anglo-American consumer fields, it is at the same time becoming “further enmeshed in a system of vastly unequal political and economic power” (207).

This study will report data from an ongoing ethnography of an all-immigrant high school in a northeastern city of the United States, taking as participants 12 undocumented youth currently attending or recently graduated from the school. The data was gathered using an ethnographic approach that included participant observation, interviews and the use of time diaries combined with phone recall (Heymann, 2000; Robinson & Godbey, 1997), and analyzed to produce thick descriptions (Geertz, 1973) of the structure and content of the participants’ daily lives as well as thematic analysis (Miles & Huberman, 1994) of their consumer practices.

Preliminary findings start revealing a picture of the complex nature of how consumer patterns interact with the educational and professional prospects of this population. Most of the participants in the study have a considerable disposable income, working as much as 35 hours per week, and despite contributing social remittances to family in their home countries (Levitt, 2001), rent, expenses and food money in their living situations. Affected by their documentation status in the social institutions of work, education and the law, participation in the consumer economy is the only activity where they can interact in society without any barriers.

Furthermore, consuming allows them the perception of a more equal participation in society, albeit entering them into a system of vastly unequal relations of power.